jueves, 28 de febrero de 2013

Regresando...

Oye Poli ¿Crees en el destino?

Y en ese entonces no supe que responder, me quede perpleja esperando encontrar la respuesta a su pregunta, pero no podía... Era como querer encontrar razón en la locura. Ademas, ¿Quien necesita respuestas cuando tienes orgasmos?

Quien necesita respuestas cuando las caricias describen todo lo que tu cuerpo lleva tiempo queriendo decir, cuando los besos son la única forma de respirar y las palabras... ¿Quien necesita palabras cuando entre suspiros y gemidos se narra la historia? 

En ese momento no me importaba el destino, no me importaba la razón ni lo que pasara en algún otro lado, tampoco me importaba quien me esperaba o quien me extrañaba. Lo único que me importaba era seguir ahí, abrazada a ti esperando que no sintieras lo mismo que yo.

Tal vez no fue el destino, tal vez fuimos el experimento de alguien que juega con las distancias y el tiempo, tal vez en algún otro punto nos volvamos a ver... ¿Pero ahora que sigue? ¿Donde quedamos tu y yo? 

Y es que no es que lo llame amor, porque el tiempo no fue suficiente para que eso pasara, pero decirte adiós tampoco fue sencillo. Una parte de mi estaba ansiosa de verte por ultima vez... ¿Por ultima vez? ¿Y si todavía quiero verte? ... Y así fue como todo comenzó justo cuando terminaba.

El tiempo nunca es suficiente, menos cuando las ganas de comernos uno al otro son mas fuertes que todas esas anécdotas de la niñez que quisiéramos contar, cuando no sabemos cuando parar, cuando el mundo se destruye por la ventana y lo único que quieres es seguir viéndome a los ojos. El tiempo nunca es suficiente.

Y no sé como, ni cuando paso porque aun recuerdo la indiferencia que nos seguía esa noche que nos conocimos ¿La recuerdas? Justo el día que llegabas teníamos que terminar en el bar mas nefasto de la ciudad comprando cerveza barata y bebiendo hasta vomitar. Y después el olvido, la ausencia, el trabajo y de nuevo la distancia ... Hasta que un día regresaste para quedarte y entonces nuestras miradas que mas que gusto desbordaban ganas de devorarnos de un solo beso, coincidieron y diría que fue el comienzo, pero no, tu lo habías iniciado ocasiones antes de que yo me diera cuenta... 

Pero el adiós nunca es suficiente, siempre buscaremos la manera de recordarnos, la manera de estar presentes y llenar un poco de nuestras vacías miradas. Tal ve no quería darte ese beso, tal vez ni siquiera quería despedirte, tal ve quería mas momentos a tu lado.

Lamento tanto no haber pasado un poco de mi vida a tu lado.




No hay comentarios:

Publicar un comentario